La artroscopia de cadera es una técnica de cirugía mínimamente invasiva que permite ver y trabajar directamente en el interior de la articulación con unas pequeñas incisiones en la piel, de menos de un centímetro cada una. La intervención se realiza con anestesia general y dura unos 90 minutos aproximadamente, aunque la duración dependerá del tipo de lesión y del tratamiento aplicado.
La intervención se realiza con anestesia general y dura unos 90 minutos aproximadamente, aunque la duración dependerá del tipo de lesión y del tratamiento aplicado.
Este tipo de artroscopia está indicada para diagnosticar con certeza:
Durante el procedimiento, se realiza una tracción de la pierna, de modo que el espacio de la articulación se distiende al máximo para facilitar el procedimiento. El cirujano marcará sobre la cadera del paciente unas referencias anatómicas para localizar los puntos de entrada, donde se practicarán pequeñas incisiones menores de 1 cm que se denominan portales artroscópicos. Por la incisión del tamaño de un ojal para introducir el artroscopio; y otras pequeñas incisiones para introducir el instrumental quirúrgico. Lo habitual es hacer de dos a tres pequeñas incisiones o portales, dependiendo del procedimiento quirúrgico.
La intervención se realiza con anestesia general y dura unos 90 minutos aproximadamente
Durante las 2 semanas antes de la cirugía podría darse la situación de que el especialista le solicite que deje de tomar medicamentos que dificulten la coagulación de la sangre.
Además se debe comunicar el consumo de alcohol y el consumo de tabaco, ya que el tabaquismo puede retardar la cicatrización de heridas y la soldadura de huesos.
Después de su realización es posible que el paciente pueda sentir molestias, edema y adormecimiento en el pubis, durante unas horas o días. Durante 1 semana o 10 días, en general, se permite la actividad según molestias y reposo relativo.
Aproximadamente a los 5-7 días de la artroscopia se realizará una primera revisión y cura en la clínica y se le aconsejará que inicie el tratamiento con el equipo de fisioterapeutas. Estos iniciarán un tratamiento personalizado a su lesión y se le adaptarán nuestros protocolos a su caso concreto.
Durante los primeros 15 días, el objetivo será:
Además es importante seguir estos consejos: